El
adiestramiento siempre es la mejor vía de corregir la conducta de su perro. Sin
embargo, hay que tener en cuenta que ladrar es una conducta normal de un perro.
Sólo necesita tomar medidas cuando esto se convierte en un problema de
convivencia.Controlar los ladridos de su perro es una parte importante de su
responsabilidad como dueño. Al fin y al cabo, los ladridos excesivos pueden
resultar molestos no sólo para usted sino también para sus vecinos.
El porqué de tanto ruido
El
primer paso para solucionar el problema consiste en entender por qué ladra un
perro. Algunos perros ladran porque intentan hacerle saber que quieren algo.
Puede que tengan hambre, sed o simplemente quieren jugar.
Algunas razas de caza, como
el Basset Hound y los Terrier, ladran para avisar del comienzo de la caza, y
otras razas como el Husky, el Alaskan Malamute y el Samoyedo aúllan, para
estimular y dirigir a la manada, por lo que al ser un comportamiento
heredado es muy díficil de eliminar. Entonces desde ya, a la hora de elegir una
raza, ten en cuenta estas consideraciones:
- La soledad: es la causa
principal de ladrido excesivo. Si dejas a tu perro mucho tiempo solo, aún
sabiendo que es un animal tremendamente social, si se siente inseguro solo
en casa, va a ladrar constantemente expresando su soledad y tristeza.
Puedes darle algunos juguetes que requieran un trabajo
y atención adicional para mantenerlo ocupado mientras estés fuera.
Una buena manera de reducir la ansiedad es dar a su
perro una vieja prenda de ropa sin lavar o cualquier cosa que tenga un fuerte
olor a su familia.
En cuanto
vuelvas, juega un poco con tu perro y haz ejercicio
con él. El perro te habrá echado de menos y no hay mejor manera de
restablecer el vínculo.
- En guardia:Una de las razones más comunes por las que un perro ladra es para
avisar. Si su perro ve a alguien acercándose a la casa, ladrará para
hacérselo saber. Ya que ve en usted al jefe de la manada, querrá que usted
lo investigue.
Algunos perros han sido educados para dar la alarma y
es posible que usted quiera alentar esta conducta. Deje que su perro ladre para
llamar su atención pero hágalo callar en cuanto se haya asegurado de que no hay
ningún intruso.
- El miedo: si tu perro está expuesto a
numerosos estímulos externos, que oiga mucha gente hablar, ruidos de la
calle, etc. y eso le produzca agitación, ten preparado para él una caja de
cartón donde pueda refugiarse y sentirse protegido.
- La socialización: un perro bien
socializado no tiene por qué ser un ladrador compulsivo. Asegúrate de que
viva dentro de casa con la familia y se relacione diariamente con otros
perros y personas.
- La ansiedad. Una de las razones más
comunes del ladrido del perro es la ansiedad. Un perro con una alta carga
de ansiedad debida a la falta de ejercicio físico estará ladrando en todo
momento con tal de apaciguar y quemar esa energía. Prueba de aumentar el
nivel de actividad física y verás cómo la frecuencia de ladridos se verá
reducida notablemente.
Una vez, que tengas localizada la causa del ladrido excesivo, edúcale a
reducir ese ladrido.
Cuando ladre por miedo, excitación, etc. nunca lo acaricies ni hagas ningún
gesto que él pueda interpretar como un refuerzo o premio por esa conducta.
Bien al contrario, cuando ladre y quieras evitar ese ladrido, la acción
inmediata al ladrido debe ser un estímulo desagradable: un tono de voz de
rechazo: NO!!, rociar con agua, … siempre un estímulo negativo que él lo asocie
con algo negativo (nunca el castigo).
A la mínima ocasión en la que notes que tu perro no ha ladrado en una
situación en la que normalmente sí lo hacía, prémiale: alabanzas, caricias,
comida…
Nunca grite si quiere que deje de ladrar ya que puede
provocarle ansiedad y perjudicar el aprendizaje. Asimismo, puede confundir
fácilmente a su perro porque puede pensar que usted también está ladrando.
Gritar sólo refuerza la costumbre de ladrar.
No hay comentarios:
Publicar un comentario