Cuando llega el buen tiempo,
y empieza el calor, solemos acercar a nuestros peludos a la peluquería, para
que les libere de semejante abrigo de pelo
el cual ya ha hecho su función en invierno. . En estos casos unos dueños
prefieren cortar más y otros menos, pero en cualquiera de los dos casos hay que
tener mucho cuidado con el flequillo.
Una de las razones
principales es que cuando el perro lleva mucho tiempo con flequillo no debemos
ser radicales a la hora de cortárselo, ya que un cambio tan brusco puede ser
perjudicial para sus ojos.
El flequillo impide que el
sol le dé de lleno en los ojos, además protege contra el polvo o cualquier cosa
que pueda entrar en ellos. Por tanto, el corte del flequillo puede producir
daños en los ojos o molestias, en cuyo caso el perro se rasca con la pata y los
daños pueden ser incluso mayores, razón por la que es mejor no cortarlo del
todo sino rebajarlo.
Asimismo, antes de tomar una
decisión que pueda perjudicar al perro es indispensable consultar con el
peluquero. Aun así, si queremos cambiar rotundamente la imagen del perro es
mejor hacerlo en otoño-invierno, cuando la luz no es tan fuerte, esto hace que
el problema se minimice al máximo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario